Este poemario es un legado del ayer. Un breve e intenso recorrido a través de los manantiales de luz de la infancia y su ternura. El continuo descubrimiento de esa edad que nos empuja veloces y luego nos olvida. Un regresivo viaje a esa frontera de sueños que desembarca en las azules playas de la adolescencia, donde los recuerdos, colgados en el tendal del tiempo se cruzan y entremezclan, hermosos y agridulces, con los primeros adioses que van llegando...El calor de una nieve que entre los dedos resbala y no regresa.