Lo que empez¢ siendo una mera recopilaci¢n de antiguos textos, se acab¢ convirtiendo en un viaje vital. Un viaje lleno de sinsabores, de las alegr¡as y las penas que sufre un adolescente que quiere comerse el mundo y que, no tiene muy claro si con el paso del tiempo, ha sido el mundo el que le ha comido a ‚l. Primeramente, fue un ejercicio de mirada atr s. De ordenar en las estanter¡as de la vida todos los acontecimientos que la vida me hab¡a deparado. Una mirada cargada de la pasi¢n, la fuerza y el ¡mpetu que otorga la juventud, y la nostalgia y el sentido com£n del paso de los a¤os. Y finalmente, esta obra se ha convertido en mi manera de cerrar una etapa. Con ella he dejado de ser un adolescente para convertirme en una persona adulta, con todas las responsabilidades que la edad te impone, pero con los mismos sue¤os y anhelos de cuando joven.ÿ De empezar a ser consciente de qu‚ significa esto de estar vivo.
