La abadía de Santa María de Husillos fue un monasterio con una gran historia. La actual parroquia de la localidad fue testigo del devenir de los condados de Monzón y de Castilla y de la política de influencias, y relaciones entre los reinos de León y de Navarra, por lo que atesora una importante colección de documentos históricos que han sido ahora recopilados por David Marcos Díez (Palencia, 1975) en un libro editado por la Diputación.
La publicación reúne 351 documentos datados entre los años 904 y 1608 que forman la colección documental de Husillos. «Esta colección es una fuente imprescindible para la historia de Palencia en la Edad Media y para muchos de los principales acontecimientos políticos y religiosos a nivel general de los siglos X y XI. Su documentación da luz a uno de los períodos más oscuros de la Historia de Palencia, el que abarca entre finales del siglo VIII hasta mediados del siglo XI, principalmente en lo que se refiere al Condado de Monzón, las restauraciones de la Diócesis palentina y el inicio de la repoblación en estas tierras», explica David Marcos Díez, licenciado en Historia en 1997 por la Universidad de Valladolid, que es autor también de una decena de artículos sobre historia medieval de Palencia y sobre la Real Chancillería de Valladolid, en donde trabaja como archivero facultativo desde 2004.
La Abadía de Santa María de Husillos fue una de las instituciones eclesiásticas más importantes de la diócesis de Palencia. «El hecho de que su historia estuviera sin escribir y su documentación sin editar nos animó a emprender su estudio, comprendiendo la gran importancia de su documentación para la historia de Palencia», agrega el historador.
De hecho, a excepción de algunos documentos concretos, la documentación de la abadía estaba sin editar y sin estudiar en su mayor parte, por lo que se hacía necesario un estudio completo e integral de la institución.
David Marcos Díez mantiene una tesis diferente a la que llevó al Museo de Palencia una plaza que al parecer procede de la abadía de Husillos. «Es muy improbable que esta placa proceda de Santa María de Husillos, ya que, en primer lugar, no está documentada arqueológicamente su aparición en el claustro o alrededores de la antigua abadía.
Además, en toda su documentación y fuentes de cualquier tipo no hay rastro de este ni de ningún abad llamado Monio, a la vez que no encuadraría en su evolución histórica», señala. Para el historiador, si hubiese procedido de la abadía, hubiera quedado reflejado su contenido en algún momento en su documentación o en la tradición oral de sus miembros, teniendo además en cuenta el amplio marco cronológico de la colección
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