Más que los Activos Físicos (Tangibles), son los Activos Inmateriales (Intangibles) los que proporcionan los beneficios del futuro, por lo que su estudio y valoración crece en importancia. Todo esto hace que en las organizaciones aparezcan razones suficientes para intentar medir los Activos Intangibles y, en particular, los que se refieren al conocimiento. La consecuencia de esta premisa es la adopción como axioma que la gestión empresarial innovadora esté basada en una buena Gestión del Conocimiento que traiga consigo el mejor aprovechamiento e incremento del Capital Intelectual. Avanzando en esta línea, este trabajo propone la parametrización de variables que explican el Capital Relacional, como componente principal de un modelo de Capital Intelectual, en el ámbito de un Espacio Regional (Comunidad Autónoma del País Vasco) con cooperación, en el seno de Cluster del Conocimiento/Ezagutzaren Clusterra, de diferentes agentes sociales y económicos.
