Jacobo es un chico normal: ni gordo ni flaco, ni alto ni bajo... Vive con su amigo Tino y su familia porque sus padres lo abandonaron cuando aún era muy pequeño. Y desde su séptimo cumpleaños, se transforma en lobo todas las noches de luna llena. En
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información