La transición ocupa un lugar destacado en el imaginario español.Reverso positivo de la tragedia representada por la Guerra Civil, latransición se ha convertido en el mito fundacional de la nueva Españaque emergía del franquismo. Promocionada en el exterior como un modelo que emular, buena parte del mito se fundamenta en la idea de queestuvo exenta de violencia política, de que apenas hubo derramamientode sangre. Pero ¿fue la transición tan pacífica como se pretende? Apartir de una ingente cantidad de datos no publicados, este estudiodefinitivo desvela el ciclo de violencia que, lejos de ser culpa única y exclusivamente de ETA, cabe atribuir tanto a radicales de todaíndole como a miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad delEstado en ocasiones más partidarios de desatar la represión que deservir a la naciente democracia.
Este libro explora,además de las motivaciones y las prácticas de todos los actoresimplicados en la violencia, la reforma del sistema represivofranquista, afectada por el recurso a la tortura o a la «guerra sucia» contra un terrorismo creciente. Sophie Baby estudia igualmen