Una fiesta.
Un asesinato.
Sin testigos. El cadáver de Kerry Dowling, de dieciocho años, aparece en el fondo de  la piscina. Ninguno de los invitados a la fiesta que dio, aprovechando la ausencia de sus padres, ha visto absolutamente nada. Sin embargo, la ausencia de testigos no significa que falten  sospechosos, y la policía no tarda en centrarse en el novio de Kerry,  con el que discutió en mitad de la celebración; o en su vecino, que se  enfadó por no ser invitado (y todos saben lo difícil que es para Jamie  relacionarse con los demás y contener las emociones). Se trata de una  comunidad en la que todo el mundo se conoce y conocía a Kerry muy bien:  su ex, sus amigos, sus profesores, sus vecinos... e incluso su asesino. Mientras la policía sigue investigando, aparentemente dando vueltas en  círculos, la familia y los amigos de la víctima esperan a que se haga  justicia. Todos salvo la hermana mayor de Kerry, que decide tomar cartas  en el asunto y ayudar a los investigadores. Pero lo que la intrépida  Aline no sabe es que resolver el asesinato de su hermana pondrá su propia vida en peligro... Críticas:
«La reina de la alta tensión.»
The New Yorker «Siempre sabe cómo mantenernos intrigados.»
The New York Times «Sin defectos.»
Daily Mirror «Lectura ideal para los amantes del género policiaco. La recomiendo sin  duda puesto que engancha desde el principio y se lee en un suspiro (a mí me duró sólo un día).»
Blog Mati caza libros «Novela trepidante, sin pretensiones, donde lo que prima es el crimen y la investigación. Lectura adictiva.»
Blog La devoradora de letras