MI CIUDAD IMAGINADA

MI CIUDAD IMAGINADA

Editorial:
KIREEI
Año de edición:
Materia
INFANTIL Y JUVENIL
ISBN:
978-84-945308-0-7
Páginas:
15
Encuadernación:
RÚSTICA
Disponibilidad:
RECÍBELO EN 72H

11,50 €
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Ya está a la venta Mi ciudad imaginada, en catalán La meva ciutat imaginada y no puedo estar más contenta. Anoche le comentaba a mi compañera de aventura Vireta, ilustradora del libro, que Mi ciudad imaginada ha superado todas mis expectativas, y ya eran altas. No es el libro que imaginé, es incluso más bonito.

Aquí en este post ya os conté el otro día qué es Mi ciudad imaginada. Hoy os sugiero que leáis la contraportada del libro escrita por Elena Ferro, donde resume exactamente cual es el espíritu de esta publicación.

¿Te gustaría acompañar a Max en un viaje extraordinario por su ciudad imaginada?

Visitaremos una ciudad llena de sorpresas que cuestionará cómo son y cómo deberían ser las ciudades desde el punto de vista de los niños.

Max nos invita a dejar volar nuestra imaginación y a completar su historia con los detalles de nuestra propia ciudad ideal.

Mi ciudad imaginada es un libro para leer, observar y compartir, pero también es un libro para dibujar y colorear, para pensar y soñar.

Porque los niños tienen mucho que decir sobre las ciudades que habitan para que sean ciudades más humanas para todos.

No quiero extenderme pero me apetece mucho contaros muchas cosas sobre la ciudad de Max, la ciudad que hemos imaginado Vireta, una invitación a dibujar, pintar y soñar una ciudad mejor.

Noelia Terrer, copywriter, la ha descrito así:

La Ciudad Imaginada: un viaje a la ciudad que nos merecemos.

Cristina se imaginó a Max, Vireta lo visualizó, y el propio Max hizo el resto. Se fue de viaje a su Ciudad Imaginada, un entorno ideal, donde respiras respeto por la naturaleza, las personas, la cultura, la diversión y la creatividad. Vamos, un lugar ideal para quedarse a vivir. Pero, claro, entonces piensas: ¿y por qué no podemos vivir en un lugar así? Las ciudades son entornos en los que viven personas, hechos POR personas… pero, ¿por qué no parecen hechas PARA personas?

Max incita a los pequeños ciudadanos a imaginar y plasmar sus propias ideas sobre la ciudad ideal. A pensar en lo que queremos y no lo que es. Porque después de pensar, reflexionar, hablar, debatir… llegará el momento de hacer. Y Max sabe que ellos sí lo harán. Nuestros pequeños ciudadanos crecerán y lograrán ese cambio, harán realidad la Ciudad Imaginada.

Hace dos noches leí el libro con mi hijo Biel, en la cama, nos pasamos una hora entera mirando todos los detalles, le sacamos un montón de jugo, solo leyendo y mirándolo. Ya estamos haciendo planes para dibujarlo y pintarlo juntos. Me dijo que le encantaría vivir en una ciudad como esta, sobre todo si fuese conmigo y este ha sido para mi el mejor final de esta historia.

La sesión fotográfica que veis la ha realizado mi querida Heva. Como siempre, la ha bordado con su mirada, y con la ayuda inestimable de sus pequeños. Gracias, Heva, una vez más, por tu talento y tu generosidad, por mimar tanto con tu cámara mis proyectos.

Gracias también a cuatro estupendos ilustradores que han participado con una pequeña sorpresita que no quiero revelar aún, para que la veáis por vosotros mismos. Más adelante os hablaré de ella.

Gracias a algunos niños y niñas que también han participado de manera muy especial y que también os lo iré mostrando.

Gracias a Elena Ferro y a Noelia Terrer, por sus textos sobre el libro, a Roser Jordà por la traducción al catalán y la corrección ortotipográfica, a Fernando Gil, la imprenta, por su excelente impresión. A mi compañera, Carmen González por ayudarme con la venta y distribución, a Coaner, Rocío Mejías, Montse Mármol, Andrew Maguire, por sus lecturas, y feedback, a Sandra Pérez por ayudarme con el rediseño de la tienda online y a todos por estar siempre ahí.

Y mis gracias más especiales por supuesto son para Vireta. Tenía muchas ganas de trabajar con ella, y sabía que podíamos hacer algo bonito juntas. Como veis, las ilustraciones de Vir son puro caramelo visual. La ciudad que ha imaginado es una delicia, no puede gustarme más. Gracias, compañera por soñar conmigo esta ciudad maravillosa.