RODRÍGUEZ GONZÁLEZ, AGUSTÍN RAMÓN
Por lo general, la política naval de la restauración ha sido analizada exclusivamente en función de la derrota naval de 1898. Es arriesgado relegar el estudio de la política naval de más de 20 años a los hechos ocurridos entre finales de abril y mediados de agosto de 1898.
Difícilmente puede juzgarse una política naval sin conocer y detallar los planes navales que produjo la época en toda su extensión: en primer lugar, la flota planeada en relación con las necesidades; en segundo lugar, la infraestructura industrial y financiera que hacen posibles las escuadras.
Este libro intenta ofrecer una visión general, tanto de las necesidades como los recursos y las realizaciones de la política naval de la época, relegando para investigaciones posteriores el análisis de la campaña naval del 98, que se cree necesita una revisión y una actualización.
Índice:
Prólogo
Introducción
CAPÍTULO I. LAS FLOTAS EN LA ERA DEL IMPERIALISMO
1.1. Introducción
1.2. Las misiones de las flotas
1.2.1. Bélicas
1.2.2. Coloniales
1.2.3. De prestigio
1.3. El impacto tecnológico
1.3.1. Vapor, hierro y acero
1.3.2. La lucha cañón-coraza
1.3.3. Nuevas armas: minas y torpedos
1.3.4. Adelantos y opera
1.3.5. El factor humano
1.4. La revolución del pensamiento y de la estrategia naval
1.4.1. Una época de confusión
1.4.2. El carácter del del combate naval
1.4.3. La estrategia británica
1.4.4. La respuesta francesa: la "Jeune Ecole"
1.4.5. Mahan
1.4.6. La Guerra de Corso
1.4.7. Guerra total y profecías de desastres
1.5. Tipos de buques
1.6. El incremento de las flotas mundiales entre 1870-1900
CAPÍTULO II. LA ARMADA ESPAÑOLA, DE 1805 A 1875
2.1. Decadencia
2.2. La época isabelina
2.3. La crisis del sexenio
Conclusiones
CAPÍTULO III. PREMISAS DE UNA POLÍTICA NAVAL
3.1. Política exterior
3.2. Condicionamientos estratégicos
3.2.1. Distancias y escalas
3.2.2. Canales
3.2.3. Dependencia tecnológica
3.3. La industria naval
3.3.1. Astilleros privados
3.3.2. Astilleros del estado
3.3.3. Industria auxiliar
Conclusiones
CAPÍTULO IV. LA NECESIDAD DE UNA ESCUADRA, 1875-1885
4.1. La opinión
4.2. Joaquín Costa
4.3. Los primeros planes navales de la Restauración
4.3.1. El programa de Durán (1880)
4.3.2. El programa de Pavía (1883)
4.3.3. El programa de Antequera (1884)
4.3.4. El proyecto Moret (1885)
4.4. Los comienzos de la nueva escuadra
4.4.1. Los buques
4.4.2. Desarrollo industrial
4.4.3. Los inventores
4.5. La crisis de las Carolinas
4.5.1. Antecedentes
4.5.2. El incidente
4.5.3. Balance de fuerzas
4.5.4. Resolución
Conclusiones
CAPÍTULO V. LA LEY DE RODRÍGUEZ ARIAS, 1887
5.1. La gestión
5.1.1. Antecedentes. El plan Beranger
5.1.2. Aprobación, polémica y revisión
5.2. La financiación
5.2.1. El crédito extraordinario
5.2.2. Restricciones presupuestarias
5.3. La adjudicación
5.3.1. Proteccionismo y desarrollo industrial
5.3.2. Política de contratos
5.3.3. Plazos y condiciones
5.4. La construcción de la Escuadra
5.4.1. Las empresas privadas
5.4.2. Los astilleros estatales
5.4.3. Empresas auxiliares
5.4.4. Dependencia del exterior
5.5. El personal
5.5.1. Cuerpo general
5.5.2. Otros cuerpos
5.5.3. Marinería y clases
Conclusiones
CAPÍTULO VI. EXPANSIÓN Y PRESTIGIO
6.1. Precaria sensación de seguridad
6.2. Política de prestigio
6.2.1. Visitas y exposiciones internacionales
6.2.2. El río de la Plata
6.3. Campañas del Pacífico
6.3.1. Mindanao
6.3.2. Carolinas
6.4. África
6.4.1. Marruecos
6.4.2. Sáhara
6.4.3. Guinea
Conclusiones
CAPÍTULO VII. LA FASE DEFENSIVA, 1894-1898
7.1. El Parlamento
7.2. El Estado de la Escuadra
7.3. La amenaza japonesa
7.4. Cuba
7.5. El nuevo plan de Beránger
7.5.1. Compras de buques en el extrajero
7.5.2. Encargos a astilleros nacionales
7.5.3. Modernizaciones
7.5.4. Infraestructura
7.5.5. Financiación
7.5.6. Lucidez y críticas
7.6. Filipinas
Conclusiones
CAPÍTULO VIII. HACIA EL DESASTRE
8.1. El desarrollo del poder naval de los Estados Unidos
8.2. Un Balance teórico en 1898
8.3. La situación real
8.3.1. Filipinas
8.3.2. Caribe
8.3.3. La península
Conclusiones
Conclusiones Generales
Anexo
Bibliografía
Índice onomástico
