Relatos nada edificantes?o sí es lo que dice el título,
un conjunto de dieciséis relatos cuya única pretensión
es la de hacer pasar un buen rato al lector y, por
qué no, también pensar, al reflejar unmundo de situaciones
nada ejemplares, no por absurdo, enocasiones,
menos real.
La mayoría de los relatos están escritosdesde un
sentido del humor un tanto amargo, a veces ácido,
perocasi siempre crítico. Otros, en cambio, son
expresión desentimientos donde el autor vuelca su
sensibilidad para resarcirsede los anteriores.
En cualquier caso, este es un libro ameno ydivertido,
que sabrá a poco al lector y le dejará un gratorecuerdo,
esperando alguna continuación.