En su catorce cumpleaños, Daniel soltó una sonora bofetada a su madre. Fue un accidente, claro, pero causó una revolución en casa e inició una aventura rocambolesca.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información