Lo que empezó como un simple cuaderno de bitácora donde poderregistrar las pequeñas cosas que hacíamos en nuestro día a día haterminado convirtiéndose en algo especial, en un resumen de un granviaje al Sáhara y de la más pequeña e importante parte demí.
Resuelvo este viaje con un libro que finaliza una etapa deaprendizaje, una nueva conexión neuronal que es solo la puerta anuevos caminos y nuevas etapas de aprendizaje y derazonamiento.
Sin duda, queremos abastecernos de conocimiento,aprender y saber más, más y más. Desde que somos bien pequeños,nuestro cerebro se las goza con la ingesta de nuevos datos. Eso si?,no a cualquier precio. La energía que consume nuestro cerebro en elproceso de aprendizaje debe ser inversamente proporcional a laadquisición de información y de la valía de la misma.
¿Que cómo se mide eso? Pues, no lo sé, llegar a ese conocimiento conlleva unesfuerzo que mi cerebro no esta? dispuesto a realizar.