Escrito por el premio Pulitzer David Halberstam
Cuando piensas en Michael Jordan te vienen a la memoria
momentos increíbles en la historia del baloncesto. Pero detrás de su grandeza, se esconde también un lado oscuro y desconocido: la de un competidor despiadado, un jugador que siempre quería ganar, aunque también sabía escuchar. Jordan fue un líder nato.