A finales del siglo XX, el prestigio institucional del Banco de España vivió un momento álgido. Sin embargo, la gran crisis financiera del siglo XXI supuso un grave deterioro de la confianza en el cometido del supervisor, hasta llegar a convertirse para algunos en uno de los chivos expiatorios de sus graves consecuencias. En este libro se analiza este pronunciado vaivén desde la perspectiva interna de la memoria del autor.