Rodolfo Rossi tiene la habilidad de encontrar las grandezas y las miserias universales del alma humana en los peque¤os detalles cotidianos que nos pasan desapercibidos en el traj¡n diario. As¡ una taza de caf‚, una charla aparentemente intrascendente o un recuerdo, se despliegan como figuras troqueladas y nos abren una ventana al universo entero. La obra se estructura como una red, cada una de sus cuatro partes es un tejido espec¡fico: la observaci¢n de algunas charlas de caf‚, el relato autobiogr fico, la ficci¢n teatral, la reflexi¢n filos¢fica. Pero todas estas partes est n unidas por la mirada pausada y profunda del autor, que nos enfrenta a lo m s grandioso, a lo m s oscuro y a lo m s profundo del ser, como un gran espejo en el que el lector se ver reflejado y no podr evitar sentirse conmovido. Cecilia Caimi