Carlos II ha sido objeto de un dilatado desprecio, que se ha correspondido con el olvido y el desconocimiento de su reinado. Si el monarca quedaba oculto tras el despiadado sobrenombre de El Hechizado, la época en que ocupó el trono ha permanecido largo tiempo cubierta por una utilización abusiva y totalizante de la idea de decadencia, que alejaba el interés de los historiadores. Ambas caracterizaciones constituyen dos persistentes y poderosos mitos, muy difíciles de desarraigar, a pesar de las numerosas investigaciones de las últimas décadas sobre aquel periodo, que constituye actualmente uno de los más atractivos para los historiadores modernistas de dentro y fuera de España. Con el respaldo de sus estudios y el conocimiento de la amplia producción historiográfica disponible, el autor realiza un análisis de conjunto y plantea, desde su propia perspectiva, un estado de la cuestión de cuanto hoy sabemos sobre el rey y su reinado, que abarcó los treinta y cinco últimos años del siglo XVII.