Leonora Vicuña es una fotógrafa chilena cuya obra ofrece una visión poco común de los márgenes de la sociedad, concretamente de Santiago durante una época turbulenta y políticamente cargada (1978-1983).Su obra combina la sensibilidad poética con la fotografía, ofreciendo una narrativa única de los espacios ocultos y olvidados de la ciudad.Su obra resulta idónea para coleccionistas y amantes del arte que aprecian tanto la técnica de la fotografía como su capacidad para evocar emociones y pensamientos.Entre 1978 y 1983, la entonces joven fotógrafa chilena recorrió las calles de Santiago, una ciudad llena de contrastes entre sus barrios, agitada, autocensurada y degradada. Presionando de vez en cuando el obturador de una cámara rusa, buscaba esos márgenes donde el tiempo se detiene. Con sus propias manos, resaltaba y coloreaba los detalles, como una artesana transgredía la foto sagrada a su manera, mucho antes de la llegada de la fotografía digital y el Photoshop.Vicuña, antes de ser fotógrafa, ya era una poeta con un lenguaje agudo y sagaz. Cada detalle se convertía en un universo en sí mismo, como palabras a