Afortunadamente, cada día somos más los que «despertamos» en El GranJuego de la Vida y decidimos de qué forma avanzar sobre eltablero.
Y es precisamente a esos seres despiertos,conscientes, valientes y guerreros a quienes está dedicada esta obra.Es a ellos a quienes les digo:
¡Adelante! ¡Sal ahí fuera yCONQUISTA TU CAMINO!
Porque es el camino el que pone y te cruza con otros caminantes que pueden (o no) llevar la misma dirección quetú, pero que nunca hacen tu camino. Puedes compartir el camino conellos. No tú el suyo; no ellos el tuyo, sino cada uno el suyo. Por lotanto, nadie más que tú puede conquistar tu camino. Solo tú puedessacarle todo su jugo.
Y no: no vale esperar a mañana.