El cuartel general de la flota naval de las aguas del norte encomienda al Batallón 203 que dé soporte a la marina del Imperio en su misión de apresar y aniquilar a cualquier embarcación superviviente de la Unión Aliada de Legadonia. Tras una encarnizada batalla, Tanya y sus compañeros consiguen dar buena cuenta de los soldados de Legadonia, entre los que se encuentra el coronel Anson Sue, que termina siendo atravesado por el arma de Tanya. De regreso a la base, un barco que navega junto a un submarino levanta las sospechas de Tanya, que cree que puede pertenecer a la Unión Aliada de Legadonia. Lo que no sabe es que en su interior viaja Urbansaul en su intento de buscar exilio en el Reino Unido de Albion. Mientras tanto, las sinceras y puras oraciones de Mary Sue, la hija del coronel Sue, hacen que reciba las bendiciones de los dioses...
