Cuando los destinos de Don Siegel y de Clint Eastwood se cruzaron dio comienzo una de esas historias que forman parte de la mitología del cine americano. Siegel, cineasta curtido en la serie B, y Eastwood recién llegado del desierto de Almería de rodar con Leone la trilogía del dólar. A través de cinco películas Siegel y Ea stwood componen un apasionado relato fílmico que viaja desde "la jungla humana" hasta "fuga de Alcatraz". Entre medias se sitúan dos obras palpitantes y esenciales: "el seductor" y "Harry el sucio". A ellas hay que sumar "dos mulas y una mujer". El cine de Clint Eastwood, su grandeza como cineasta, no puede entenderse sin el magisterio de Don Siegel.