El “peine de nácar” es un paseo por la vida de unos personajes que se entrelazan para formar una historia que transciende varias generaciones. Un objeto de familia, como tantos otros que tenemos muchas veces en nuestro poder, es la guía para el desarrollo de la narración. Se convierte en regalo, intercambio o amuleto dependiendo de las manos en las que se encuentra. El valor de las historias quedarán guardados en él para siempre, en ese silencio que los objetos contienen, y que los personajes suelen jugar a adivinar.