El 31 de julio de 2024 murió el profesor Francisco Puy Muñoz. Su muerte supuso una pérdida muy importante académica y humana para todas las personas que lo quisimos. Sin duda fueron muchos los discípulos y amigos que mi maestro hizo a lo largo de su camino vital y académico. Todos ellos, conocimos su espíritu de trabajo, su sentido de la responsabilidad, su dedicación a la cátedra y su vocación de servicio. . él siempre me dijo que ?nadie debe pasar por la vida sin aspirar a dejar su propia huella?. O, dicho con otras palabras: ?nadie debe conformarse con seguir las pisadas que otros anduvieron antes, sin intentar, al menos, abrir un poco más de camino para los que vengan detrás?. Me consta que él lo hizo y esa es la razón por la que escribí este libro. . Es cierto que tuve que reunir un poco de valor para hacerlo, porque el recuerdo de su ausencia todavía supone un peso para mí, pues lo echo mucho de menos. Pero no quise demorar más la escritura de este homenaje con el que quiero dejar constancia expresa y directa de quien fue Francisco Puy Muñoz. . Mi maestro fue un hombre de su tiempo, con los valores pro