Una novela inteligente e irónica sobre las ficciones el ahorro, la clase media y la estabilidad familiar de una sociedad instalada en una crisis permanente. Argentina, verano de 2001, la caja de seguridad de un banco de provincias: una chica de veinte años da vueltas mientras su padrastro le pega al cuerpo con cinta de embalar los ochenta mil dólares que componen los ahorros familiares, ante la perspectiva de un colapso bancario. Ahora es la guardiana de un inestimable capital material y simbólico en un país donde las sucesivas crisis económicas constituyen una extraña forma de estabilidad. Pero esa no es la única crisis a la que se enfrenta Belén en su caluroso regreso a la ciudad natal: también están las secuelas de una tormenta recurrente, el cadáver de un contrabandista que flota en el río Paraná, los vestigios de haber crecido en una familia ensamblada. Así, siguiendo la intrahistoria de unos fajos de billetes, Carmen M. Cáceres narra con inteligencia y fina ironía las ficciones del ahorro que alimentan la memoria sentimental y la fe en el porvenir de una familia de clase media en la que muchos podemos