La segunda parte de La Regenta, obra maestra del escritor español Leopoldo Alas "Clarín", continúa explorando la vida y las tribulaciones de Ana Ozores en la ciudad imaginaria de Vetusta. Publicada entre 1884 y 1885, la novela se distingue por su aguda introspección psicológica y su detallada descripción del entorno social y moral en el que se desenvuelven sus personajes.El inicio de parte está marcado por el invierno en Vetusta es más que un cambio climático; transforma el estado emocional de sus habitantes, y en particular de Ana Ozores. Este período se presenta como un tiempo de introspección y, en el caso de Ana, de angustia creciente. La descripción del "veranillo de San Martín" y la reacción de los vetustenses frente al cambio estacional se convierte en una metáfora que abarca desde la resignación hasta la lucha contra la inevitabilidad del destino. Ana, lejos de resignarse, siente que el inicio del invierno intensifica su propia crisis existencial.La tristeza que embarga a Ana Ozores no es simplemente el resultado de un cambio estacional, sino una manifestación más profunda de su conf