Los mandalas pueden inducirnos a un estado de relajación similar al que alcanzamos con el yoga. ¿Y si juntáramos ambas prácticas?
La clave, como descubrirás en este libro, está en la respiración y en disfrutar de las 37 láminas de preciosos mandalas que te ofrecemos.
¿Preparado para ser un mandala yogui?