En 1846 Charles Dickens ya tuvo la idea de hacer algunas adaptaciones de sus novelas para leerlas en público. Tomaba de sus novelas los capítulos que más conmovedores le parecían, a veces las resumía, quitaba lo que a su juicio les sobraba, etc. "Dombey e hijo", "Vida y aventuras de Martin Chuzzlewit", "David Copperfield" y "Oliver Twist", las cuatro adaptaciones reunidas en este volumen.