Este libro forma parte de una serie de publicaciones dedicadas a las grandes obras de la dramaturgia española del siglo XIX. En esta ocasión, se centra en el estudio y la edición del teatro breve de esa época, un tipo de piezas que representa aproximadamente un tercio de la vasta producción escénica de un siglo marcado por el surgimiento y desarrollo de la industria teatral. A partir del entremés barroco y otras formas teatrales cercanas, la proliferación de obras breves se intensificó en el siglo XVIII, consolidándose el sainete como género principal para expresar el costumbrismo y la comicidad popular. Durante el Romanticismo, esta tradición teatral se mantuvo viva y fue enriquecida por los escritores surgidos en el contexto de la revolución burguesa, quienes incorporaron nuevos temas, personajes y una particular visión de la realidad. En este volumen se incluye una muestra representativa de piezas teatrales en un acto, que refleja el tono, la temática y los rasgos distintivos del género en los años centrales del siglo xix. En total, son doce obras elegidas no solo por el éxito que alcanzaron en su tie