¿Y si el estoicismo no fuera una herramienta para fortalecerse, sino un camino para disolver con humildad el ego y habitar la vida con presencia? Un estoicismo subversivo es una propuesta filosófica que desafía la versión clásica del estoicismo como herramienta de autoayuda y lo recupera como un camino radical de transformación interior. El autor nos invita a mirar de frente el miedo, la muerte, el deseo o el dolor —no para controlarlos, sino para habitarlos— y a convertirlos en materia de autoconocimiento. Con una mirada crítica y contemplativa, actualiza conceptos como el Logos, la virtud, la libertad interior o la serenidad, y los entrelaza con cuestiones contemporáneas como el ego, la identidad, el sufrimiento o el vacío. El camino estoico no es perfeccionar el yo, sino aprender a salir de él. A vivir con lucidez, sin ser el centro, pero siendo para el mundo.