Una mayor?a de votantes de las grandes ciudades del mundo son profesionales y se sienten desatendidos. Una ciudad de profesiones propone un viaje desde el siglo v a.C. hasta la precarizaci?n de nuestros d?as, recomponiendo un puzle sobre una realidad fundamental que desde sus or?genes tiene que ver con el conocimiento pr?ctico y el civismo. La transici?n de la asalarizaci?n a la individualizaci?n est? causando estragos en muchos profesionales que se sienten indefensos y a menudo humillados. Sin los profesionales no es ni ser? posible la nueva econom?a digital, ni los derechos humanos, los objetivos de desarrollo sostenible (ODS), ni las nuevas Agendas Urbanas. ÀPor qu? maltratamos a aquellos que cuidan de nosotros? Ante las emergencias sociales y las pandemias, las profesiones siempre responden. Ning?n municipio puede funcionar sin su apoyo ni se podr? prescindir del arte de los profesionales como un componente esencial de la nueva ciudadan?a. Regenerar el vac?o dejado por el eclipse de las clases medias resulta imprescindible. CdP propone la recuperaci?n contempor?nea del brazo artesanal urbano, mediante Un