«Pese haber transcurrido más de siete décadas desde la muerte de la mayoría de los fundadores del nacional-sindicalismo (desde Ramiro Ledesma a José Antonio, pasando por Julio Ruiz de Alda y Onésimo Redondo, todos ellos asesinados en 1936 por el bando del Frente Popular) y casi cuatro décadas de la desaparición súbita de un régimen que se autodefinió como nacional-sindicalista (el franquismo), la historia de Falange Española sigue inmersa en la penumbra. No debe sorprender a nadie que los mitos y tópicos sobre este movimiento político que encarnó en sus inicios al fascismo español, se mezclen entre la leyenda y la realidad, las falsedades fabricadas por sus enemigos y los tópicos de los apologistas, provocando el riesgo de perder la posibilidad de conocer lo que verdaderamente supuso la acción política y doctrinal de este puñado de militantes políticos que cambiaron la faz de un país. Mujeres y hombres dispuestos a implantar revolucionariamente su programa de regeneración nacional en una época de zozobra y deriva, plenamente conscientes que formaban un colectivo incomprendido, tanto por las izquierdas como por las derechas, que les combatirán por igual con una saña jamás vista hasta entonces».
